26.5.09

Y pensar que hay periomercaderes que defienden a este gobierno corrupto


La obligación del Estado es brindar a los alumnos un ambiente sano y limpio, marco de estudio que en la provincia de Corrientes, gobernada por Arturo Colombi, no se cumple.

El Instituto de Música “Horlando De Biassi”, tiene más de 1400 alumnos que conviven en ínfimas condiciones de higiene y salubridad. El Ministerio de Educación nunca respondió sobre las necesidades de personal para la alimentación y limpieza. Los cursos están divididos con maderas, pizarrones, machimbres, armarios y cortinas.
El colegio funciona en el edificio de Belgrano 1320, desde el 25 de septiembre de 2007, por inicio de las obras de ampliación del local de calle Catamarca. El plazo era de un año y medio, y debían haberlo entregado en abril de este año, estándose ya en los plazos previstos. Cuando entregaron el edificio de calle Belgrano no tenía las dependencias necesarias para que funcione una escuela. En el primer piso funcionaban 3º; 4º y 5º años del Bachillerato con Orientación Musical; dividiendo los cursos con armarios, cortinas y con pizarrones apoyados en sillas.
Para el ciclo lectivo 2008 la cooperadora realizó divisiones de madera con machimbre y colocó pizarrones ayudados por docentes y tutores para que cada división pudiera brindar clases. El galpón de la planta baja no tenia circulación de aire ni iluminación adecuada para que los chicos y profesores lean las partituras por lo cual se tuvo que realizar la abertura del techo en varios lugares, colocar dos ventiladores grandes de pared y todos los plafones de luz necesarios para iluminar el lugar, donde los alumnos se descomponían por el calor inaguantable.
En el mismo galpón funcionan tres aulas grandes con capacidad para sesenta o más personas construidas por Arquitectura Escolar con placas de ‘durlok’ y, por el espacio físico, era imposible poner ventanas. Entonces se colocaron ventiladores de techo que con las altas temperaturas no servían para nada. De nuevo tuvo que resolver la cooperadora colocando con mucho esfuerzo seis equipos acondicionadores con la abertura en el techo para salida del aire caliente.

Nada funciona, nada existe

El edificio contaba con un equipo de aire acondicionado central para los tres pisos, pero no funcionaba, por lo cual la cooperadora se ocupó de su reparación. El Estado entrega leche y cereales para los alumnos de la secundaria, pero no destina personal para que prepare el desayuno de los alumnos. Tampoco abona el gas. La cooperadora dispone de una persona para realizar la leche y comprar la garrafa necesaria.
Esta señora es la que actualmente desde la ausencia de ‘Shonko’ limpia los baños de los alumnos, pero su horario solamente es hasta las 11,00. A la tarde y noche no hay quien limpie. El instituto tiene una población de 1400 alumnos discriminados en Capacitación Instrumental (a partir de los 10 años sin límite de edad, dependiente de la Dirección de Enseñanza Superior); Educación Secundaria (depende de Enseñanza Media); y Carreras de Nivel Terciario (depende de Enseñanza Superior)
El edificio es una mugre

Es imposible enseñar en un edificio que no mantiene normas básicas de limpieza, obligación del Estado ya que el Instituto depende del Ministerio de Educación, único de esta modalidad en el país. Se solicitó por nota el 10 de marzo a Enseñanza Superior y al Ministerio de Educación, personal para la limpieza de la escuela.
El director del Superior devolvió la nota diciendo que no correspondía el pedido ya que sólo debía hacerlo la rectora y el Ministerio de Educación ni siquiera se molestó en responder. La Dirección de Enseñanza Media lo hizo en forma verbal a través de la supervisora diciendo que “se estaban ocupando”. Pero hasta ahora.... nada. La obligación del Estado es brindar a los alumnos un ambiente sano y limpio cosa que en esta provincia no pasa.
El Instituto de Música es de gestión estatal por lo tanto el Estado debe mantenerlo en condiciones dignas para el desarrollo de la tarea escolar.
diario1588.com